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El cabello dañado y quebradizo requiere una atención especial para restaurar su salud y vitalidad. Aquí te presento una descripción general de cómo cuidar tu cabello dañado y quebradizo:
- Lava tu cabello con un champú suave y sin sulfatos. Los sulfatos pueden ser demasiado agresivos para el cabello dañado y quitar sus aceites naturales, lo que lo hace aún más quebradizo.
- Usa acondicionador para el cabello después de cada lavado. El acondicionador ayudará a suavizar y desenredar el cabello, y lo hará más manejable. Busca productos que contengan ingredientes hidratantes como aceite de argán, aceite de coco o manteca de karité.
- Evita peinar tu cabello cuando esté mojado. El cabello mojado es más susceptible a la rotura, así que es mejor esperar a que se seque un poco antes de peinarlo.
- Usa herramientas de peinado con calor con moderación. Las herramientas de calor como la plancha y el secador de pelo pueden dañar el cabello y hacer que se quiebre aún más. Si es posible, deja que tu cabello se seque al aire libre, y si necesitas usar una herramienta de calor, usa un protector térmico para minimizar el daño.
- Haz tratamientos capilares regulares. Los tratamientos capilares como las mascarillas hidratantes, los aceites para el cabello y los tratamientos de queratina pueden ayudar a restaurar la salud del cabello dañado y quebradizo. Consulta con un estilista para determinar qué tratamiento es el adecuado para ti.
- Aliméntate bien. Una dieta equilibrada que incluya proteínas, vitaminas y minerales puede ayudar a fortalecer el cabello desde adentro hacia afuera.
- Protege tu cabello del sol y los elementos. La exposición al sol, el viento y el agua salada pueden dañar el cabello, así que usa un sombrero o una bufanda para protegerlo cuando estés al aire libre.